Cómo mejorar el diseño ergonómico de EPIs
La relevancia de los EPIs en el entorno laboral
Los equipos de protección individual (EPIs) son la primera línea de defensa frente a numerosos riesgos laborales. Su papel es incuestionable: proteger al trabajador de lesiones, accidentes y enfermedades profesionales. Sin embargo, su eficacia depende no solo de la calidad del material, sino también de su ajuste ergonómico.
Una gran parte de los accidentes laborales podrían evitarse con el uso adecuado de EPIs. El problema es que, en muchas ocasiones, los equipos disponibles son estandarizados y poco adaptables, lo que reduce su comodidad y eficacia.
Un calzado que no se ajusta bien, un guante demasiado grande o un arnés incómodo pueden comprometer la seguridad y la salud tanto como la ausencia de protección.
Aquí entra en juego la ergonomía: un enfoque que no solo busca proteger, sino también garantizar que el trabajador pueda desempeñar sus tareas con confort, eficacia y sostenibilidad física en el tiempo.
Prevención de riesgos laborales y EPIs
Identificación de riesgos físicos
El análisis ergonómico comienza con la identificación de riesgos: posturas forzadas, movimientos repetitivos, manipulación de cargas o uso de equipos inadecuados.
“Un trabajador que levanta pesos sin una postura adecuada, o que realiza movimientos repetitivos sin protección adaptada, puede sufrir lesiones musculoesqueléticas que siguen siendo hoy la principal causa de baja laboral en España”, apunta Mercedes Sanchis Almenara, directora de Innovación en Bienestar y Salud Laboral del IBV, en una entrevista para la revista Formación de Seguridad Laboral (FSL).
Lo demuestran ejemplos tan sencillos como un guante demasiado rígido que reduce la destreza manual, un calzado sin el soporte correcto que genera fatiga en la jornada, o una mascarilla que no se ajusta bien y deja espacios de riesgo.
Ajuste y confort como factores de seguridad
El confort no es un lujo, es un factor de seguridad. Cuando un EPI se adapta correctamente al cuerpo, reduce la fatiga, mejora la productividad y previene lesiones. Por el contrario, un mal ajuste incrementa el riesgo de abandono del equipo, o incluso su uso incorrecto, con consecuencias potencialmente graves.
Hoy, gracias a metodologías avanzadas de medición y caracterización del cuerpo, es posible diseñar y seleccionar EPIs que se ajusten con mayor precisión a la morfología de cada trabajador. Esta personalización mejora tanto la protección como la experiencia de uso.
Selección de EPIs según perspectiva de género
Un aspecto clave en este avance es la incorporación de la perspectiva de género en el diseño de EPIs. El Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) ha liderado proyectos pioneros que evidencian la necesidad de diferenciar tallajes y características entre hombres y mujeres para mejorar la eficacia de los equipos.
Entre los proyectos destacados del IBV en esta materia se encuentran:
- LABOGÉNERO, centrado en el desarrollo de productos laborales con criterios de género;
- GÉNERO, orientado a integrar la perspectiva de género en los criterios de adecuación ergonómica de los entornos de trabajo.
Estos proyectos ya tienen aplicación en empresas concretas, como es el caso del fabricante de calzado laboral Paredes que ya diseña calzado con perspectiva de género apoyándose en nuestra tecnología.
Todos ellos muestran cómo un EPI pensado para la diversidad genera mayor seguridad y aceptación entre los trabajadores.
Productos y servicios del IBV enfocados a la selección y fabricación de EPIs
El Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV) es un centro tecnológico con más de cuatro décadas de trayectoria en el ámbito de la salud laboral. Fundado en 1976, ha trabajado tanto con instituciones como con empresas para mejorar la ergonomía en los puestos de trabajo.
Como recuerda Mercedes Sanchis, “el IBV ha contribuido de forma decisiva a la evolución de la prevención de riesgos laborales en España desde la Ley de PRL de 1995, y hoy continúa a la vanguardia con soluciones que combinan investigación aplicada, conocimiento ergonómico y tecnología avanzada”.
1. Servicios para la correcta selección de EPIs.
El IBV ofrece asesoramiento especializado para la selección de EPIs, apoyando a fabricantes y empresas en la integración de criterios ergonómicos y antropométricos en sus productos.
2. Proyectos de investigación junto a empresas
El IBV colabora activamente con empresas en proyectos que materializan la importancia de la ergonomía aplicada a los EPIs.
Un ejemplo es el desarrollo de calzado laboral con Panter, donde la evaluación ergonómica permitió detectar la necesidad de un EPI personalizado. Para dar respuesta, se empleó la tecnología Avatar 3D, que permite obtener medidas precisas tanto del cuerpo como del pie y mejorar el ajuste.
Otro caso destacado es el trabajo en indumentaria para soldados, donde la ergonomía es clave para garantizar confort y funcionalidad en condiciones extremas. Estos proyectos muestran que la evaluación ergonómica no solo identifica riesgos, sino que también abre la puerta a soluciones de personalización avanzada mediante tecnologías como Avatar 3D.
3. Software de evaluación de riesgos ergonómicos ERGO/IBV
El software ERGO/IBV permite a las empresas evaluar riesgos ergonómicos en los puestos de trabajo. En muchos casos, estas evaluaciones concluyen con la necesidad de un EPI específico o adaptado. Es en este punto donde entra la importancia de tecnologías como Avatar 3D, que conectan la evaluación ergonómica con la fabricación personalizada de equipos.
4. Escáner móvil AVATAR 3D para la toma de medidas de EPIs
El sistema AVATAR 3D es una de las soluciones más innovadoras del IBV. Permite tomar medidas del cuerpo y del pie con un simple smartphone, sin necesidad de equipos de escaneo físicos complejos.
A partir de estas medidas, los fabricantes pueden analizar grandes volúmenes de usuarios y diseñar EPIs más acordes a la morfología real de cada trabajador, reduciendo las devoluciones posteriores por tallaje incorrecto y aumentando la satisfacción de los usuarios.
Para empresas especializadas tanto en en calzado y ropa laboral, como en EPIs, supone un importante ahorro de tiempo, agilizando el proceso de toma de medidas, evitando los posibles errores por tomas manuales y mejorando la rentabilidad del negocio.
5. ergoIA: Inteligencia artificial al servicio de la prevención
Además, el IBV pone a disposición de las empresas ergoIA, un software de evaluación de riesgos ergonómicos que, a través de la IA, analiza cualquier vídeo de un trabajador ejerciendo tareas repetitivas o con posturas forzadas para elaborar un informe de riesgos.
Está tecnología puede ahorrar hasta un 80% del tiempo del prevencionista y facilita la toma de decisiones sobre la necesidad de incorporar o no un EPI en un puesto de trabajo.
Buenas prácticas ergonómicas
La implantación de un EPI no termina con su entrega al trabajador. A continuación, presentamos algunas acciones clave para asegurar su uso correcto y un seguimiento eficaz.
- Realizar evaluaciones ergonómicas post-implantación: que valoren si el equipo realmente se adapta, sí genera incomodidad o fatiga, o si limita el movimiento.
- Formación constante en ergonomía y en el uso correcto de los EPIs. El IBV trabaja con empresas para que los trabajadores no sólo dispongan de protección, sino que comprendan cómo utilizarla de manera efectiva y ergonómica.
Conclusión
En palabras de Mercedes Sanchis, “el futuro de la prevención pasa por seguir reduciendo los riesgos musculoesqueléticos mediante un diseño de EPIs ajustado a la diversidad de las personas y apoyado en tecnologías digitales como Avatar 3D”.
La ergonomía no solo previene lesiones: transforma la experiencia laboral al integrar seguridad, comodidad y productividad. Por ello, cuando la evaluación ergonómica detecta que ciertos trabajadores necesitan una protección más específica, surge la necesidad de personalizar los EPIs.
Para dar respuesta, los fabricantes pueden explorar soluciones como Avatar 3D, que permiten obtener medidas precisas y diseñar equipos de protección individual adaptados a cada trabajador.
Invertir en ergonomía es invertir en salud, en eficiencia y en bienestar. El IBV, con su experiencia y sus soluciones tecnológicas, sigue siendo un aliado estratégico para empresas y fabricantes que apuestan por una protección laboral avanzada.
